La importancia del dato en la cadena de suministro

La información es poder. Y en el ámbito de la cadena de suministro, y de la logística en general, el dato – la información a la que alude la célebre frase de Hobbes- es vital para su óptimo funcionamiento. Pero un buen dato, esto es: obtenido en tiempo real, que pueda ser analizado conjuntamente con otros muchos y con el que se puede sacar conclusiones para mejorar y/o evitar un posible malfuncionamiento que pueda derivar en pérdida de tiempo y dinero. Porque la cadena de suministro es, y añadimos ahora será, siempre un objetivo estratégico, como se puso de manifiesto en una jornada organizada por VASCO, en colaboración con Deusto Business Alumni.

En ella, y en palabras de Yolanda Bautista, directora de operaciones de In Side Logistics y miembro del Comité de Dirección de VASCO se decía que “la cadena de suministro necesita un trabajo interno y uno colaborativo, no nos podemos quedar como estamos y enfrentarnos a nuevos retos: diversificar proveedores, diseñar antes de asistir con tecnología, y también sumarse a la “copetición” (colaboración + competición). Ideas innovadoras que solo ofrecen ventajas y frescuras a un sector que necesita mejorar su productividad”. Y, retomando el tema que nos ocupa, para mejorar es necesario señalar la importancia que el dato tiene en la cadena de suministro.

Esa relevancia queda atestiguada incluso por publicaciones que incidían en que los datos son la clave para superar problemas en la cadena de suministro y aludía a tecnología como gemelos digitales, los portales de datos de proveedores digitales y la automatización de datos y análisis avanzados, además del Internet de las cosas, para lograr que las organizaciones puedan lograr una mejor visibilidad de su cadena de suministro, en la que están involucrados todos los procesos, sectores, personal y tecnología encargados de entregar el servicio y/o producto al cliente final.

La toma de decisiones basadas en datos sigue siendo importante en la cadena de suministro y más aún cuando en los últimos tiempos se ha visto cómo situaciones impredecibles (como la pandemia de la covid-19 o la guerra de Ucrania, entre otros) ha puesto de manifiesto su fragilidad. Así, y para poder tomar las decisiones correctas, de forma rápida y específica, tener acceso a los datos da capacidad a las empresas de entender la evolución tanto de la oferta como la demanda y los factores que se encuentran detrás de los cambios que se produzcan, además de destacar las áreas que se necesita mejorar.

Datos que deben ir en ambas direcciones y fluir entre todos los actores/procesos involucrados en la cadena de suministro para tener información correcta disponible, que pueda ser comprensible y que se pueda utilizar de manera efectiva, e incluso predictiva, porque de ellos se pueden obtener ventajas competitivas. Entre ellas la prevención de problemas que puedan traducirse en costes, identificar nuevas oportunidades de procesos de producción más inteligentes y eficientes para tener una mayor y mejor capacidad de respuesta a los clientes.